Activistas
de la organización Greenpeace recorrieron el centro de la Ciudad con un móvil
con carteles y megáfono difundiendo la consigna “Diputada Griselda Herrera: No
hunda la Ley de Humedales”, para denunciar que la diputada riojana está
frenando en el Congreso Nacional la Ley que podría disminuir el impacto de las
inundaciones y resguardar agua de calidad donde no llueve tanto.
La diputada Herrera preside la comisión de Ambiente y
Recursos Naturales de la Cámara Baja, donde la Ley está trabada desde el año
pasado. De no ser tratada antes de fin de año, el proyecto perderá estado parlamentario
y la posibilidad de ser sancionada.
“La Diputada Herrera podría convocar a las comisiones
faltantes, y permitir que la Ley sea votada en la próxima sesión, en lugar de
trabarla e impedir el tratamiento de esta norma fundamental para tantos argentinos”,
dijo Franco Segesso, coordinador de la Campaña de Agricultura de Greenpeace.
Según Greenpeace, donde hay excedente de agua, los
humedales actúan como esponjas y ayudan a mitigar los efectos que provocan las
lluvias, y por eso requieren una norma que los proteja. En los sitios donde
falta el agua, funcionan como reservorios de agua. La Ley de Humedales
establece las pautas para regular las edificaciones y otras actividades que
afectan estos ecosistemas, de modo que puedan cumplir adecuadamente su función
ambiental.
Las últimas inundaciones ocurridas en Buenos Aires y
Santa Fe, que dejaron 50 municipios bonaerenses bajo el agua, víctimas fatales,
30 mil afectados, 6 mil evacuados y pérdidas materiales millonarias, no son un
evento aislado. Las causas de las inundaciones registradas en la ciudad de La
Plata en 2013 fueron las mismas, y las soluciones estructurales que se
requieren también. Ambos casos están asociados a fenómenos climáticos, pero el
relleno de humedales agrava notablemente esta situación.
En los últimos 10 años la construcción de proyectos
inmobiliarios que implicaron el relleno de humedales aumentó
significativamente. Estos ecosistemas se convirtieron en “tapones” que, en
lugar de absorber, retienen el agua que baja por arroyos y ríos. Las últimas
inundaciones, que dejaron 50 municipios bonaerenses bajo el agua, víctimas
fatales, 30 mil afectados, 6 mil evacuados y pérdidas materiales millonarias,
no son un evento aislado. Las causas de las inundaciones registradas en la
ciudad de La Plata en 2013 fueron las mismas y las soluciones estructurales que
se requieren también.
Greenpeace convocó a los habitantes de La Rioja y de todo
el país a llamar a la Diputada y a sus compañeros de comisión para pedirle que
modifique su postura e impulse esta Ley tan importante.
Al mismo tiempo, en las ciudades de Mar del Plata,
Rosario, Córdoba, Paraná, Salta, Buenos Aires, Posadas, Bahía Blanca y Mendoza,
activistas de la organización difunden invitando a la ciudadanía a sacarse
fotos en solidaridad con los afectados de las inundaciones para reclamar a los
diputados de cada provincia la aprobación de la Ley.
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