“No me gusta la vieja”

Pasaron las elecciones y aparecen las opiniones. Sueltos de prejuicios y ya libre de presiones los vecinos se expresan. Las computadoras Laptop,  el filósofo franco-suizo Jean Jacques Rousseaux, el Intendente y el Gobernador, ingredientes de una nota para no caer en la desesperanza. Por Félix R. Guerrero.

“El mundo de hoy se nos aparece horrible, malvado, sin esperanza.

Esta es la tranquila desazón de un hombre que morirá en este mundo.

No obstante es justamente eso a lo que me resisto.

Y sé que moriré esperanzado

Por eso es necesario crear un fundamento para la esperanza”.

JEAN PAUL SARTRE

Una persona que se cruzó esta mañana en mi camino, no importa quién, cualquiera puede opinar desapasionadamente, como de un dato menor, sobre las elecciones del domingo.

Ese alguien, con tranquila desazón me dijo “no me gusta la vieja”, refiriéndose a la reelecta presidenta de los argentinos. - ¿Por qué?, pregunto contento de que tamaño acontecimiento haya movilizado las facultades  opinatorias de mi circunstancial interlocutor. - “Porque acá hacen lo que quieren gane quien gane”. - ¿Por ejemplo?, indago. Las computadoras Laptop que les dieron a los niños de la primaria. Las andan teniendo por todos lados y las tienen llenas de jueguitos. Es todo lo que hacen con ellas. Un gasto al divino cuete. Los maestros todavía no tomaron cursos para manejarlas y trabajar con ellas en el aula. Pero, ¿Qué tiene que ver la  Presidenta de la Nación con lo que pasa en Anillaco con las Laptop? - Es que nadie controla nada, todo es un viva la joda. Esto no cambia más. Los políticos mienten y  se acomodan como quieren, hacen ganar al que se les antoja.

Esta apatía que no es ni aparente ni casual, es expresada por un joven de 22 años que, carece simplemente de fundamentos para la esperanza y el entusiasmo.

El modo de gobernar a la provincia y a los departamentos no tiene nada que ver con los planteos del viejo Rosseaux que en sus estudios políticos y sociales desarrolló un esquema social en el cual el poder recae sobre el pueblo. Las leyes en la república de Rousseau están desarrolladas conforme al orden social, establecido por la naturaleza del pacto social y no por las convenciones humanas de un sólo individuo. Las leyes deben fundamentarse en las convenciones que traducen en reglas las exigencias de la racionalidad y moralidad humana. Rousseau establece que las reglas de la asociación deben ser el resultado de la deliberación pública, ya que en ella se encuentra el origen de la soberanía. Conviene recordar que la Constitución Nacional de nuestro país está inspirada en los postulados del filósofo franco-suizo Jean Jacques Rousseaux.

Cuando alguien percibe, sin  profundizar demasiado que su gobernador dice con convencido énfasis que  no permitirá que nos saqueen  nuestros minerales, contaminando el agua, aire y cielos, y que luego de derrocar al gobernador que estaba en el cargo, cambia abruptamente de parecer y dice que la minería es buena y que nos hará ricos a todos los riojanos; cuando comprueba casi sin asombro que su Intendente y Gobernador juegan a dos puntas en las elecciones, y casi sin bronca observa cómo han promovido para que siga en el Senado de la Nación un archiconocido ex presidente senil e incapaz de representarnos, porque su único interés es eludir los juicios que pesan sobre su cabeza, ese alguien ya no lucha, ya no cree, le da todo lo mismo porque el mundo se le presenta horrible, malvado y sin esperanzas.