El
pasado sábado 18, a partir de las 11, se desarrolló la XXV edición del festival
"Chayando en el Pueblo" que tiene lugar en el salón comunal de Agua
Blanca.
Los festejos se
iniciaron con palabras a cargo de la presidenta de la comisión organizadora,
Norma Rodríguez, quien dio la bienvenida a los presente e inmediatamente se le
rindió un sentido homenaje a quien en vida fuera Marino Córdoba, verdadero
referente de la cultura de Agua Blanca en presencia de sus familiares, quienes
a su vez agradecieron el homenaje y regalaron a la comisión organizadora una
artesanía del artista, recibido de manos de la profesora Beatriz Córdoba,
sobrina del gran artesano.
Dando inicio al
espectáculo el animador José Centeno, de muy acertada labor, presentó al Dúo
Naguenechén, que en lengua mapuche significa (Dios Supremo) compuesto por dos
jovencitos, Juan (10) y Joaquín (14), con un repertorio muy festivalero y que
armonizan sus canciones en bombo y guitarra. El premio del público fue que los
declararon Padrinos del Festival.
Siguieron la fiesta
el dúo costeño, más precisamente de Aminga, Chumbita- Chumbita, cantores
partícipes de la primera edición de Chayando en el Pueblo, los que fueron muy
aplaudidos. A continuación se presentó el aimogasteño Daniel Ferrari que con su
variado ritmo hizo bailar a la concurrencia, continuando con la presentación
del cantor local Hugo Córdoba, Las Voces del Alto y Mazán 3, estos dos últimos
también con muy buena aceptación.
Restaban actuar dos
conjuntos La Banda Chamamé y Ariel Carreño y su grupo, eran las 20,30 cuando se
interrumpió la energía eléctrica y como el corte seguía (duró 6 horas), los
organizadores y la policía dieron por terminado el festival.
En el festival
también recibió un merecido homenaje la vecina María de Córdoba (8l) que desde
el inicio fue verdadera referente del carnaval de Agua Blanca y chayera de
alma, la que recibió un recordatorio y se la declaró Chayera Mayor de la
fiesta; además integrantes de la tercera edad le entregaron un presente en
reconocimiento a su espíritu de vida.
APOSTILLAS
-Se ha hecho
costumbre repartir albahaca en los festivales costeños, esta vez Dante en
representación de su madre doña Chela entregó dos bolsas de la perfumada planta
que fue repartida entre los asistentes.
-Comidas, estos
fueron los precios: empanadas 20 la docena, locro 8, pollo con ensalada 35,
porción de asado 40, sándwich de milanesa 15, flan casero poción 5.- tortilla
5. Bebidas: cerveza 12, vino 15, soda chica 8 y grande 10, fernet medida 5,
gaseosa litro l5.
-El locro, que estaba
exquisito se agotó, desde siempre lo elabora José Humberto "Chicho "
Fuentes y para destacar es que este vecino de Pinchas lo hace a manera de
colaboración sin cobrar para éste y otros festivales.
-El inoportuno corte
de luz puso fin a la velada cuando estaba por comenzar el baile y un asistente
manifestó "que lástima faltaba el postre para esta celebración de bodas de
plata y fiesta de oro".
-De las autoridades
municipales sólo estuvieron presentes dos directores, el de la Juventud,
Rolando Fuentes, y el de Turismo, "Fredy" Nieto, ambos realizando
tareas inherentes a sus áreas, y volvió a llamar la atención la ausencia de
autoridades superiores, ya que los festivales no se deben apoyar sólo con
ayudas económicas, sino también con la presencia en un festejo del pueblo.
-Fue muy buena la
labor del animador José Centeno, que parece hecho a la medida de estos
festivales pueblerinos.
Gentileza Martín de la Fuente Diario El Independiente
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