Desde
el lunes 27 de octubre, pobladores de la zona del Cantadero y vecinos de la Asamblea Riojana Capital (ARC) llevan
adelante cortes selectivos en la ruta 38, en su acceso a la provincia de La
Rioja. Denuncian la intención por parte de la CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica) de retomar el proyecto
megaminero de uranio y la continua amenaza a las fuentes de agua natural.
Los vecinos de la zona del
Cantadero junto con habitantes de los alrededores y la Asamblea Riojana Capital
denuncian que la CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica) está en camino de
retomar el proyecto megaminero de extracción de Uranio en la zona de las Cañas. “Esta
gente (CNEA) está haciendo nuevos movimientos en la zona, con lo cual los
vecinos decidieron hacer el corte y nosotros que somos de la capital en
asamblea (ARC) hemos decidido acompañar”, expresaba Cecilia Matta,
integrante de la Asamblea Riojana de Capital.
Los manifestantes denuncian
varios indicios que evidencian la intención de volver con el proyecto de
extraer uranio, “hubo varios movimientos, en principio pusieron una
tranquera. La primera vez logramos que la saquen, después vinieron con la
policía y la pusieron. Luego bajaron unas máquinas para reparación y
subieron otras que están arreglando para subir. Todos estos son
movimientos de previa. Nosotros los vecinos no queremos saber absolutamente
nada y no casualmente esto empezó hace un mes y medio, ya tenemos
problemas de agua, cosa que antes del corte con acampe a los vecinos les
sobraba. Recordemos que el corte comienza por iniciativa de los vecinos por la
situación del agua, ellos son todos productores y el agua para todos es
vital, fundamental para el que tiene campo y vive de él, por esa razón
ahora los problemas siguen” agrego Cecilia Matta.
La zona afectada por el
emprendimiento megaminero comprende una importancia central para los pobladores
de los alrededores, por su riqueza en vertientes de agua. Pero también para el
resto de La Rioja en cuanto al gran caudal de agua que podría proveer a los
barrios de la ciudad. “El yacimiento minero está en Las Cañas que es muy cerca
del Cantadero. Pero la situación del uranio no perdona a mil kilómetros a la
redonda, estamos hablando de radioactividad, con lo cual toda la zona se va
a ver perjudicada desde el inicio y de hecho ya tienen indicios de estar
con problemas. En este lugar hay 30 vertientes, es una zona con
mucha agua, no se justifica que los vecinos no tengan, incluso el agua del
Cantadero estaba proveyendo a barrios de la capital como el Yacanti, después de
eso se cerró y en un lugar, nos cuentan los vecinos, antes salía a raudales y
hoy está seco. Entonces ellos suponen que el agua la están extrayendo
para otra cosa. Son todos datos que nos dan los vecinos del lugar quienes son
los que más conocen y padecen la escasez. Los ingenieros nos decían que con la
cantidad de agua de las vertientes que había arriba no tendría que faltar e
incluso podía destinarse a la Capital que es donde hay más problemas. Esto no
está sucediendo, evidentemente han tomado una decisión política.”, continuó
explicando la entrevistada.
Los manifestantes hace
tiempo vienen realizando movilizaciones, presentando petitorios a los gobiernos
y diferentes organismos competentes, juntando firmas e incluso este tipo de
bloqueos de ruta como fueron por ejemplo los cortes en marzo de este año sobre
la misma ruta 38, con el fin de detener el proyecto megaminero de uranio. En
aquella oportunidad los manifestantes comunicaban: “Las minas de explotación de
uranio son letales. El gas radón emitido durante la explotación y aún en la
exploración, es radiactivo y viaja 1.000 km, con un leve viento de de 16 km por
hora, a partir de esta distancia decae al 50% su toxicidad, mientras que estas
explotaciones se realizaran a 20 km de nuestras casas”.
En este sentido la
movilización había conseguido que se dictara una ordenanza municipal para el
cuidado de la zona, ante la amenaza de la megaminería. Cecilia Matta nos
contaba: “Nosotros hemos peleado mucho, la Asamblea Riojana Capital ha
intentado por todos los medios de que saliera primero y estuvimos un año
escrachando al Concejo Deliberante para que se aplique y cuando al fin,
por mucha presión hecha, se mantiene como vigente una cláusula simbólica que no
sirvió de nada, porque al otro día vino la CNEA, saó el cartel y metió una
acción judicial. El fallo se lo dieron a favor, porque sabemos que el poder
político comanda sobre el poder judicial, de manera que aunque esté en vigencia
la ordenanza a la CNEA, la favorecen, por lo cual la única herramienta que
tenemos los vecinos es movilizar y defender con nuestro cuerpo, informándonos
del daño que provoca, defendiendo nuestro territorio, de manera que sabemos que
las leyes las podemos propiciar. Por el momento, ni el gobierno municipal ni el
provincial ni otras entidades, ni tampoco el gobierno nacional nos ayudaran,
hacen caso omiso de esto, es más se cagan en su propia legislación”.
Al finalizar Cecilia
anunció, que se decidió en asamblea hacer cortes sorpresivos para no ser
advertidos por la CNEA, aunque prometen avisar antes a los medios de
comunicación. Los manifestantes continuarán repudiando a la CNEA e informando a
la población “lo que importa es que la CNEA no tiene la licencia social”
concluyó la militante de la ARC.
Nota: Entrevista realizada en
el programa radial Enredando las Mañanas
de la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA)
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