Aminga: Trabajadores refundan cooperativa de calzado

Luego de la quiebra de la ex fábrica de calzados Gatic, los trabajadores apostaron a formar la cooperativa Costeños Unidos. Luego de pasar por una gestión conflictiva los asociados comenzaron un proceso de reoganización. Trabajan a fasón pero su objetivo es llegar a tener una marca propia e instalarse en el mercado.

Durante la década del ´90 la firma GatiLar S.A se instaló simultáneamente en las localidades riojanas de Chamical y Anillaco. Luego de la clausura de la empresa en el año 2000 debido a deudas impagas con acreedores y sueldos de sus empleados, un grupo de los 120 compañeros decidieron conformar una cooperativa. Así, los trabajadores comenzaron la lucha por la tenencia y explotación de la fábrica.

La Cooperativa Costeños Unidos se constituyó en el 2004 con operarios de la planta de Chamical. Algunos años después una mala gestión dejó a los trabajadores con deudas fiscales y problemáticas entre compañeros que aún continúan en la cooperativa con un proceso judicial en marcha.

Para Nelsón Rivero, actual presidente de Costeños Unidos, comenzar a refundar la cooperativa significa planificar, pagar lo adeudado. "Tenemos pensado vender algunas máquinas tanto balancines de corte, máquinas de coser calzado y hasta un grupo electrógeno. Apuntamos a emprolijar los libros, las rendiciones, los compromisos económicos de nuestra cooperativa. Es cierto, que más allá de eso, vamos a necesitar ayuda de otros espacios para seguir adelante, para poder invertir. Estamos teniendo reuniones con compañeros del sector, articulando con distintos Ministerios", afirma Rivero.

La cooperativa se dedica al diseño y cortado de aparado de calzado. El presidente de la cooperativa explica que "Costeños se fundó en el año 2004 y a fines del 2010 empezó con actividad laboral. En ese entonces hubo problemas de gestión y tuvimos que hacer una asamblea extraordinaria para cambiar la conducción de la cooperativa. Esa gestión nos dejó casi 200 mil pesos de deuda en la AFIP. Del 2010 a septiembre del 2013 estuvo la gestión anterior. Hasta ahora no se hizo una rendición de cuentas, es por eso que la estamos refundando. Nos sentimos capacitados para hacerlo", explica Rivero.

Actualmente son 17 socios, incluido el presidente, secretario y tesorero de la conflictiva gestión anterior que ya no está en función. Ellos están siendo investigados y los trabajadores no quieren que den un paso al costado hasta que la justicia se expida.

"Nos pusimos en contacto con el Área de Proyectos de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (Cnct) para asesorarnos y poder redactarlos correctamente, definir a qué los vamos a destinar ordenadamente. Nos faltan los insumos, maquinaria, hay que arrancar de a poco", comenta Rivero.

Este año la cooperativa trabajó para tres empresas: Action Sport, Zapa y Plumita. Los compañeros comenzaron a juntarse con otras empresas asociativas para poder realizar trabajos juntos como es el caso de Puporé.

El sueño de los cooperativistas es hacer un calzado propio. "Como el trabajo es a fasón no tenemos que comprar materia prima, nos hacemos cargo del transporte y de los insumos. Nuestra idea es continuar capacitando compañeros para sumarlos a la tarea y dejar de trabajar en esta modalidad, que nos ayuda ahora, pero nos vuelve completamente dependiente de terceros. Nuestra jornada laboral es de 6 a 15hs dependiendo el día, a veces nos quedamos hasta las 17hs. Calidad y buena producción es lo que brindamos a nuestros clientes. El tema es que las empresas venden a un precio final mucho más alto que el nuestro. De una zapatilla que nosotros vendemos a 25 pesos el par, en el mercado la cobran mil. Estamos trabajando para llegar a ese sector del comercio", concluyó Rivero que continúa apostando a la autogestión.

Fuente: CNCT (Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo)