Fuente Radio Fénix – NOTA CON AUDIO
Intervienen avalando un acuerdo por fuera de la ley
Daniel Rodríguez usurpó una vivienda de la APVyU desocupada. Luego llegan dos policías con el dueño. Le ofrecen un trato: les da el auto y le dejan la casa. “Un policía de apellido Cativa me decía que si no firmaba los papeles me dejaban en la calle” contó Daniel Rodríguez a Radio Fénix. El titular de la Regional Tercera de la Policía, Carlos Martínez, dijo estar al tanto del hecho, pero que “jamás hubo orden de desalojo” ni intervención de la Justicia.
Daniel Rodríguez - Crio. Carlos Martínez
“Me metí en una vivienda de la APVyU en Anillaco, porque estaba deshabitada. Luego vinieron dos policías con el dueño, me dijeron que era un delito. Después me ofrecieron como trato que les diera el auto y me quedaba con la casa. Un policía de apellido Cativa me decía que si no firmaba los papeles me dejaban en la calle” contó Daniel Rodríguez a Radio Fénix.
El trato se cerró el martes, en las mismas dependencias policiales de Anillaco.
“Me metí en una vivienda de la APVyU en Anillaco, porque estaba deshabitada. Luego vinieron dos policías con el dueño, me dijeron que era un delito. Después me ofrecieron como trato que les diera el auto y me quedaba con la casa. Un policía de apellido Cativa me decía que si no firmaba los papeles me dejaban en la calle” contó Daniel Rodríguez a Radio Fénix.
El trato se cerró el martes, en las mismas dependencias policiales de Anillaco.
Consultado, al respecto, el comisario Carlos Martínez, titular de la Regional Tercera de Policía, dijo tener conocimiento de los hechos y del acuerdo al que llegaron.
“Pero de todas maneras –dijo Martínez- nosotros no avalamos de ninguna manera el convenio. Solo intervenimos para darle seguridad a las partes y lograr que se cese en la comisión del delito”.
Pero este accionar policial es altamente cuestionable. En principio, porque las casas de la APVyU no se pueden vender, alquilar o permutar. Salvo que exista una autorización expresa de la APVyU. Cosa que no existió en este caso.
Lo cual deja un gran manto de sospecha sobre el rol que cumplieron los uniformados. Según Daniel Rodríguez fue “obligado” a firmar y se sintió amenazado a hacerlo.
Según el Comisario Martínez, a su entender “no hubo presión”. Pero aclaró que jamás hubo orden de desalojo, porque nunca se dio comunicación a la jueza de la situación.
Lamentable!!!!!!!!
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