Por Félix Guerrero
La vida política nos abarca a todos: a los apasionados por una sociedad justa, a los estudiosos de esos apasionados y de esas sociedades, a los especuladores que hacen de la política un modo eficiente y rápido de enriquecerse, a los tibios e indiferentes, y a los nostálgicos de los tiempos del “no te metas” y “en algo andarán”.
Salvo violentas intervenciones militares en la vida institucional de nuestro país, el curso de la Democracia nos sucede en estaciones de cuatro y dos años, en que se cambia (cuando no hay re, tri, o cuatrireelegidos) de profetas del progreso.
En este políticamente año bisiesto que nos acontece a los presentes y a algunos que regresan del más allá a votar, una loca tensión sube a niveles peligrosos, por la caldera de la euforia y amor al pueblo expresado en promesas de fidelidad eterna a los gobernados y por gobernar. Cada quien más de los candidatos, compite con sus pares en fabulosos proyectos como la conquista del tesoro escondido en la cueva de Alí Babá y los cuarenta ladrones; a quien distribuye mas “ayudas” en materiales de construcción, bolsones de comida y dinero en efectivo para los más reacios. Las promesas se distribuirán democráticamente para todos.
El Dos Mil Once va a ser un año largo. Ya se largó la carrera de las traiciones, amistades nuevas y flamantes enemistades; odios y amores, fiascos y entusiasmos hasta el mes de Octubre. Y una tarde divina de Octubre, a contramano de Alfonsina, regresaremos de los tortuosos mares a la suave playa de la normalidad, exhaustos, resignados o ilusionados (eso se verá).
En el departamento Castro Barros ya se largó la carrera con el oficialista Del Moral a la cabeza, montado en vientos del clientelismo (el no es buen jinete montando los burros del pueblo). Le siguen a la zaga los curtidos rocines de la oposición espoleados por la urgencia de lograr un Concejo Deliberante autónomo e independiente del omnímodo poder del Ejecutivo.
Esta Fiesta de la Democracia estará atravesada por la nueva modalidad de fraude electoral que tiene vigencia desde hace unos añitos: la popular importación de votos desde departamentos y provincias vecinas. Si bien esta práctica presenta la ilusión de una invasión turística, les complica la vida a los matemáticos autóctonos, cuyas ecuaciones no pueden desentrañar la paradoja de Menos habitantes -según censo 2011 y más habitantes según-padrón electoral.
Además de atentar contra la salud mental de nuestros matemáticos, esta modalidad es dañina porque por un lado personas ajenas a las problemáticas del departamento deciden por el futuro de los costeños sin tener que soportar daños colaterales; por otra parte estas políticas migratorias-transitorias le salen caro al pueblo porque esa amabilidad debe pagarse al contado al votante común y darle terreno o casa al votante mas pretensioso.
Tanto generoso despilfarro de recursos no condice con las necesidades de vivienda de muchos vecinos nuestros, de toda la vida, que no tienen un techo para cobijar a sus hijos.
¡Ciudadanos! Más allá del cambio de actores y repartos, de conformes e inconformes, esta instancia electoral nos presenta la oportunidad de hacer que esta “fiesta de la Democracia” sea una verdadera fiesta, ejerciendo nuestro derecho a elegir y ser elegidos, con dignidad, legalidad y responsabilidad. Este acto tan sencillo puede cambiar una historia de corrupción, servilismo y atraso.
Félix R. Guerrero
Su comentario, Félix, resume el pensamiento de muchas personas de bien que el día de la "Fiesta de la Democracia" concurren a elegir y ser elegidos con una gran dosis de dignidad, legalidad y responsabilidad pero se dan con que la realidad del servilismo, corrupción y atraso aún es más...., aún nos puede....
ResponderEliminarDicen que la esperanza es lo último que se pierde, con ése ánimo hay que seguir de pié.... Con ése ánimo hay que perseverar para intentar cambiar la realidad, con ése ánimo hay que rebelarse contra los "hoy devenidos en caudillitos costeños"....
Ojala sr guerrero muchos sean los que se den cuenta y no solo unos POCOS,tal vez sea de hora de pensar en el futuro de nuestros hijos y replantearnos:quiero que mañana mi hijo viva de 200 pesos, que solo tenga un ingreso digno en epocas de cosecha o si con todo mi sacrificio voy a tratar de que sea profesional porque al recibirse tendra trabajo en su departamento? Es hora de pensar en nuestro futuro y no en el de aquellos que vienen solo a votar.
ResponderEliminardon felix mucha reflixion poco trabajo papa trabajen x la costa no hacen mas q criticar ni si quiera contructiva esto es politica no es para tibios es para gente con ganas de hacer mucho x la costa ud q estan haciendo x nuestra costa con los pensamientos no come la gente ni tiene techo y esa gente q opina q ni vive en nuestra costa por que no se abstiene q a los costeños esten en pas social con un futuro de trabajo me pregunto por que no dicen lo q se hizo en la costay lo mucho por hacer trabajemos dejemonos de joder con pensamientos q no tienen fundamentos de nada
ResponderEliminarEstimado anónimo, le recuerdo que nosotros hemos trabajado por la Costa, gratis, varios años con la Escuelita, dando apoyo escolar; hemos aplicado el programa de alfabetización de adultos gratis también; hemos trabajado en las Cooperadoras Escolares; actualmente estamos trabajando en la radio gratis por que es una Radio Comunitaria sin fines de lucro. Creo que no nos corresponde proveer de comida y vivienda a la Comunidad (Tampoco podemos, eso está claro). Me gustaría saber cual es su aporte, ademas de no ser tibio y anonimo.
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