Censo 2010 vs. padrones electorales

Por José Nicolás Azcurra (Abogado)

"Para citar un ejemplo, el censo 2010 al Dpto. Sanagasta le asigna un crecimiento poblacional del 6,7%, pero en los padrones provisorios aparece un incremento de electores superior al 30%. Este fenómeno físico o sociológico resulta de difícil explicación y creo que más bien se trata de una figura que el Código Electoral vigente tipifica como delito en su Art. 137 "…

En el proceso electoral que se ha abierto este año en toda la República, y con anticipación en nuestra provincia de La Rioja se encuentra en curso el cronograma electoral. Hace pocos días ha vencido el término para que se formulen las observaciones al padrón, es decir el pedido de correcciones de cualquier error material que pudiera presentar. Los datos personales de cada elector: su nombre, el tipo y número de documento; domicilio u cualquier otro relacionado con sus datos filiatorios. 

Después vendrá el plazo para impugnar los padrones, lo que es un tema muy importante a abordar, y que es lo que motiva la presente reflexión, pues se advierte un fenómeno de difícil explicación, pues mientras que el censo 2010 arroja una disminución de la densidad poblacional en la mayoría de los departamentos del interior, en cambio en los padrones electorales se observan un importante incremento en los electores, con un promedio del treinta por ciento que resulta llamativo. 

Los municipios son autónomos, y esta autonomía debe ser resguardada férreamente por los habitantes de cada departamento, y sus autoridades, ya que de lo contrario ocurre que extraños al departamento, que "han hecho" cambios de domicilio y como viene sucediendo, el día del comicio se presentarán en las mesas, entonces ellos son los que reemplazarán la voluntad genuina del electorado local, y decidirán quienes ha de gobernar al municipio en el que no viven, cuando nada les interesa de los problemas que sufre los habitantes. Nos dice la Corte Suprema de Justicia de la Nación que: "....Que la autonomía municipal debe ser interpretada como parte de un sistema institucional orientado hacia la descentralización y fundado en un federalismo cooperativo. Esta orientación fue promovida por el Art. 3º, de la ley 24.309, que convocó a la reforma constitucional de 1994 con el fin de "fortalecer el federalismo" y se plasmó en los Arts. 5 y 123 de la Constitución Nacional" (Caso "Pérsico"). 

Para citar un ejemplo, el censo 2010 al Dpto. Sanagasta le asigna un crecimiento poblacional del 6,7%, pero en los padrones provisorios aparece un incremento de electores superior al 30%. Este fenómeno físico o sociológico resulta de difícil explicación y creo que más bien se trata de una figura que el Código Electoral vigente tipifica como delito en su Art. 137 que establece: "Inscripciones múltiples o con documentos adulterados. Domicilio falso. Retención indebida de documentos cívicos. Se impondrá prisión de seis meses a tres años, si no resultare un delito más severamente penado, al ciudadano que se inscribiere más de una vez, o lo hiciere con documentos apócrifos, anulados o ajenos, o denunciare domicilio falso. Serán pasibles de la misma pena quienes retengan indebidamente documentos cívicos de terceros". 

Sabemos que el fraude en materia electoral no es un fenómeno actual, muy por el contrario, es de vieja data y que ha servido para que a fines de 1800 nacieran partidos como una clara reacción ante el fraude y que son una de sus banderas. 

Y como la inventiva humana es tan grande, hay muchas formas de defraudar. Así la compra de votos, que el ex presidente Carlos Pellegrini defendió públicamente, esta práctica, pues se recurría a cualquier maniobra para lograr mantener el poder. 

Esta práctica fue habitual en los años 1880 a 1990. 

No podemos dejar de citar también a las viejas luchas de Leandro N. Alem e Hipólito Yrigoyen en contra del régimen instaurado para perpetuarse a cualquier precio en el poder, hasta que en 1912 se dicta la ley Roque Sáenz Peña que permitió mejorar la calidad institucional. 

La oligarquía terrateniente encerraba a los peones para que no vayan a votar, por eso en uno de sus discursos de campaña el General Perón aconsejaba a los trabajadores rurales a que rompan los candados de las tranqueras y vayan a cumplir con su deber cívico. 

Formas de fraude: Existen numerosas formas de quebrar la voluntad popular: retener documentos, detener a electores, etc. Pero la "viveza criolla" hoy recurre a la "trata de electores", esto es reclutar a personas, hacerle hacer a veces en su propio domicilio el cambio de domicilio hacia tal o cual departamento. El ciudadano, ni siquiera debe molestarse en ir al Registro Civil del departamento, pues el cambio lo hacen en su propio domicilio, normalmente de la capital, o de provincias vecinas, etc. También constituye fraude confundir el estado con partido político y usar los bienes, recursos del estado en beneficio de un facción o mantener en puestos públicos a parientes que sólo se los ve en día del pago en su oficio. Ante todo ello, es necesario que cada ciudadano se transforme en un defensores de su dignidad y no permita que extraños le elijan quien le ha de dirigir su destinos por los próximos cuatro años. 

Quien tome conocimiento de la comisión de un delito tiene la obligación de denunciarlo ante la Justicia y de ese modo sin dudas que demostrará su compromiso con la democracia y contribuirá a que nuestro país se considerado como una sociedad seria, ordenada y que repele la corrupción.